Hola a todos,

A propósito de la aportación de Octavià Aleixandre a mi entrada respecto a BILOS señalar únicamente que la persistencia de la aspiración en dialectos septentrionales que poseen bilho y bilhuzi y otras variedades le da en principio la razón en este caso. No obstante habría que averiguar la antigüedad del término. Siendo las formas más utilizadas bil(h)o y bil(h)uzi no me parece o mejor dudo, en este momento, que la comparación ibero-vasca establecida por Lafon sea totalmente descartable. Que vasco bil(h)o proceda del latín pilu– podría ser un espejismo aunque todas las probabilidades estén en contra. Hay que recordar también que parece que una b– inicial en ciertas circunstancias inhibe el paso de -l- a -r- (por ejemplo aquitano BELEXS, vasco belatx). Mis felicitaciones y agradecimiento en todo caso a Alexandre.

Lo que si le pediría a Alexandre es que explicitara las razones para calificar la ecuación de ibérico zerraikala con vasco zerraikala ‘que seguía’ de pseudo-lingüística. Nos haría, a mí particularmente, un gran favor.