“El debate científico se ha terminado”. 

Una afirmación cuyo eco resuena desde hace más de cuatro años de ciberpared a cibermuro. Los medios cumplieron en su momento su deber de desinformar al ciudadano acerca del veredicto de la Comisión Científica designada a principios de 2008 para asesorar a los arqueólogos de la empresa Lurmen al respecto de sus hallazgos excepcionales de las campañas de 2005 y 2006 en el oppidum romano Iruña-Veleia: es vox populi que los grafitos son falsos. Pero aparte de esa vox, quidam rumores quoque sunt populo: hay también ciertos rumores en el pueblo.



Scientia / Scita


Ahora bien: ¿es posible (o factible, o aceptable, o lícito) que un debate científico termine? ¿No es la ciencia en sí un eterno cuestionamiento (o debate) de verdades sujetas con alfileres, atento a continuas aportaciones de datos procedentes de nuevos descubrimientos? Ciencia, qué hum-ana y hum-ilde palabra para tan pretencioso concepto de altos vuelos: del latín scire, “saber”, scientia es un participio de presente en neutro plural, que se traduciría como “las cosas que (se) están sabiendo” si se quiere ser fiel al aspecto no terminado, activo y continuo del participio de presente. “Lo ya sabido” – y, por tanto, lo que sería un debate terminado y cerrado- quedaría recogido por un participio de aspecto terminado -y además pasivo- como el de perfecto: “scita”. Palabro sin cabida para el limitado humano en la incognoscible realidad (ni entrada en el diccionario).


Veristas VS Falsistas


Alguien habló un día con lucidez en un cibermuro de los varios que mantienen abierto el debate [científico] que ciertas personas quieren dar por cerrado, y posteó esto:

Hola
Llevo tiempo siguiendo los foros sobre el tema este, sin otra cosa que curiosidad
Por eso también me considero alguien que se ha acercado al tema desde la neutralidad, aunque luego siempre hay unos que te convencen m mas que otros. Y aprovechando los comentarios estos, queria dar mi opinión sobre algo quizás muy genérico
Y es que hay una cosa que me llama la atención y es esa división establecida entre falsistas y veristas. Denominación que creo recordar la crearon los que se llaman a si mismos falsistas
Y hay algo que me parece obvio.
Y es que mi impresion es que los falsistas parecen como obsesionados en querer que las piezas sean falsas. Aunque a veces utilizan argumentos, cuando ven que éstos no son creibles, pasan al ataque y al intento de descrédito, con agresividad muchas veces que es quizás lo que más rechazo me ha causado a mí. Eso y la evidente cerrazon en negar la posibilidad de un estudio científico del material.
Por otra parte, los llamados veristas, al margen de ser en general mucho más argumentativos y, en mi opinión, bastasnte más ecuánimes y educados en su discurso, son veristas no porque defiendan a muerte la veracidad sino el llegar a la verdad. En ese sentido les va de vicio la denominación. Y ello mediante argumentos, debate científico y con un loable empeño en un estudio científico del tema



El debate [científico] está en la cibercalle, y está abierto


En esos cibermuros en donde se sigue discutiendo sin descanso desde hace cuatro años acerca del llamado affaire Veleia (lo cual es en sí mismo un claro exponente de que el debate no está cerrado en absoluto) resuenan asimismo y por parte de algunos de los llamados falsistas comentarios hasta tal punto obtusos y cerrados al beneficio de la duda que verdaderamente hacen sospechar que existe una firme voluntad (un firme deseo, que no certeza) de que los grafitos sean falsos. 

He aquí -y éste es en realidad el contenido que quería presentar en este post- un muestrario de perlas falsistas extraídas de una intensa conversación del foro Terrae Antiquae (iniciada en 2010 y que ya cuenta con 303 páginas) en torno a la hipótesis aceptada por algunos veristas de que los ostraka hubieran sido material amortizado en un paedagogium en donde se estaría aprendiendo al mismo tiempo latín y a escribir, lo cual explicaría los errores de ortografía que para los falsistas son errores garrafales de un muy torpe falsificador que no sabe latín:

(Copio y pego: las faltas de ortografía no son mías):

-lo que no puede ser…..NO PUEDE SER. 
-No puede ser y si no puede ser ya me dirá ustéd que ha sucedido. 
-El problema ya está resuelto,Koenraad,pero ustedes no quieren aceptarlo.Y no es un problema:son muchos ,porque son muchas las piezas que no coinciden. 

-La de científicos que hay en el mundo especializados en las disciplinas que conciernen a Veleia y ni uno se ha dignado atender el asunto.la gente de fuera que sabe algo  se parte de risa cuando vé las fotos de las inscripciones.

-Pues el pedagogium de Veleia tres cuartos de lo mismo, claro que no podía ser de otra manera, los caristios apuntaban maneras de Bilbao: Los niños usaban como material de borrador cerámica, hueso y vidrio. Espérate a que encuentren los apuntes pasados a limpio, ¡en mármol y con letras de oro, oiga! Con lo sencillo que sería garabatear en las tablillas de cera habituales en aquella época.
-No le veo lógica a usar materiales como cerámicas, hueso o vidrio como material de borrador. Es más sensato (y posiblemente más económico para las familias por muy patricias que fuesen) que los niños hubiesen utilizado las reciclables tablillas de cera: se puede corregir lo que se ha hecho mal y es más fácil de trabajar que los otros materiales.
-Lo que sí es excepcional es lo de Iruña-Veleia. Anda que no habrá habido escuelas en todo el imperio romano y , hasta ahora, no se ha encontrado nada semejante.
-A todo esto me pregunto porque han de someter a análisis la citada pieza cuando muestra una palabra más moderna que la Coca Cola. Me pregunto también que tierno educando sostendría la pieza mientras con filosa navaja iba labrando el mágico nombre en una escuela que más parecía la de los Picapiedra, con sus cuadernos de ladrillo, hueso, vidrio y cerámica. Lápices de sílex, de hierro y bronce bien afilados. La letra con sangre entra pero la literalidad del dicho se lleva en esta escuela hasta el extremo.
-La existencia del pedagogium es la explicación que se ha dado desde el punto de vista verista a las  piezas escritas. Yo solo trato de entender cómo era el funcionamiento de esa escuela que da productos que se salen de la regla y, a día de hoy, al que le resulta rebuscada y complicada esa hipótesis es  a mí.
-En concreto el mayor problema es el maestro, no los alumnos, sino el maestro que utilizaba como borrador materiales en los que borrar o corregir haría más confusa la tarea   de enseñar y, me parece además, no corregía los errores de sus alumnos o no sabía enseñarles de forma efectiva.
-Lo del paedagogium, a mi entender, es una auténtica tontería.  Rascar el vidrio como si fuese una «pizarra» para aprender a escribir los peques en el «cole» es un auténtico disparate. A mi entender se han pasado un montón y, ahora, supongo que no queda más que apechugar y salir por peteneras.  Como aqui ya somos todos mayorcitos a ver quien tiene los santos memoles de enseñarle a su hijo, o nieto según caso, a escribir de semejante manera.

-No sé qué pensaría Okham de  la explicaciones  a partir de las rarezas y de un pedagogium tan sui generis  en el que se empleaban trozos de cerámica duros como piedras y huesos pero  en fin:cosas veredes,Sancho.

-En lo relativo al paedagogium es muy chocante que siendo una escuela “privada” los alumnos utilizaran, como bien dice Jokin, huesos y trozos cortantes de cerámica a modo de tablillas. “Bromas” aparte, un analfabeto (así identifica Vd. al autor) no es precisamente el prototipo de alumno de esa escuela ¿no cree?
-Si los niños escribían también en tablillas cada vez entiendo menos la situación: usaban como material de borrador las cerámicas, etc y por eso abundan los errores ortográficos ¿Y las tablillas eran para escribir a limpio?. ¿No sería más sensato que el maestro mandase  usar las tablillas de borrador y luego, si tenían hacer una exposición de lo aprendido, pedirles que elaborasen un grafito sin faltas de ortografía?. Aún así no acabo de ver a los niños haciéndolo.
-En este Laboratorio de Veleia los niños sabían anticiparse a los tiempos.Lo que no sé es porqué se alarman tanto con que diga que está escrito en castellano cuando en el conjunto hay otros dos nombres más egipcios Ramses y Seti escritos según la convención y la tradición erudita española. Que un nene veleiense haya clavado tres nombres modernos es digno de admiración. 
-Toda regla tiene su excepción, sigue buscando «imposibles» amparados en la mencionada regla. ¿No se te hace rarillo, no todos ya que algunos ni regla incluida, que estos ostracas realizados por los nenes del *paedagogium se encuentren siempre «al filo de lo imposible». 
-Lo pasmoso no es sólo que unas cuantas docenas de anomalías, que hay que ir a buscar aquí y alllá por todo el Imperio Romano, se den juntas en el mismo lugar y en menos de diez palabras, sino que todas ellas (las improbables, como las «M» de ángulo elevado, y las inexplicables, como «Nefertiti») coincidan con personajes, formas, ortografías y signos de diversos lenguajes modernos (formales, icónicos y del lenguaje ordinario). !Estos veleienses eran futuristas! Para contrarrestar esa evidencia palmaria (claro que se dan cuenta), la estrategia de los veristas consiste en analizar con lupa los informes de la comisión para ver si encuentran algún fallo que, según ellos, los invalide. Llevan así desde hace varios años, subiendo cada vez más el tono de las descalificaciones y machacando una y otra vez con lo mismo (lo que nos cuenta Van den Driessche está en los informes de Filloy o Iglesias de hace años y hace años lo discutimos aquí). Parece que ellos no están interesados en la autenticidad o no de las inscripciones, sino en una estrategia de defensa del equipo Lurmen que consiste en atacar a la acusación desacreditando a sus expertos. Es su juego y jurídicamente legítimo. Pero este no es el debate en un foro de arqueología y por eso he renunciado a seguir su juego. Lo que pasa es que a veces conviene dar un toque de atención para avisar a los y las lectoras desapercibidas y recordar como están las cosas… desde hace años. 
-Me pregunto por qué los niños de la escuela y su pésimo pedagogo no siguieron el ejemplo de los maestros lapicidas alaveses que escribían los nombres de los griegos que pasaron por aquí a la antigua usanza. Plinthas, Tychia, Aeleia Hellice, Rhodanus y Atilius Triphaenus se preocuparon de que dejaran bien escritos sus nombres y pasaron de la moda juvenil que imponía Plintos, Tiquia, Elia Elice, Rodano Y Atilio Trifeno o bien Tripeno. Lo que esos niños eran unos mastuerzos geniales y proféticos.
-Las muestras de falsedad son bastante sólidas. Vds. intentan aferrarse siempre a un clavo ardiendo, cosa que es loable, lo admito y les admiro siempre que lo hagan con corrección, se lo repito nuevamente, pero a cada contradicción rebatida buscan otra y otra y otra… multiplicando exponencialmente las posibilidades de falsedad, yo diría que constriñiendo la línea de lo posible, ya que al final llegan a escudarse en la propia entelequia, como último recurso. El “y si…” en cada una de las fases hace que ese proceso retorne al principio de la opinión de la falsedad. Por eso, volviendo a la imaginación y dando una vuelta más de tuerca solo faltaba que vds. postularan: no, es que el paedagogium en realidad era una escuela de canteros y marmolistas.
– ¡A ver, Lucius! ¿Cómo esculpirías Pontifex Maximus en una lápida? – Utiliza un pedazo de tégula de la cuadra.
– ¡Así, maestro! PONT. MAX.
-Muy bien Lucius, ¡y qué buena letra! ¿Y si lo hicieras en esta Lucerna? – Le dijo el preceptor.
– ¡Así, maestro! P. M.
-¡Excelente!
– Para el fin de semana me traducís D.P.S.D.D y P.P.F.C. y no rompáis más de dos vasijas para ello, que no quiero más reclamaciones de vuestros padres. Si es necesario lo inscribís en los huesos del venado de la cena. Por cierto, a partir de ahora los exámenes serán orales. Ya no caben más tablillas de TS en esta estancia. ¡Ah! y antes de iros a la cama curaros las heridas que os hacéis con los punzones, que tienen muy mala pinta.
-Veleia siglo III, pedagogium de la Domus Pompeia Valentina, cuyo lema parace ser “Hagamos de la excepción la norma”.
En esta ocasión tenemos una imagen poco acorde con los cánones de las figuras clásicas de la época. ¿Las escenas de carácter erótico eran material escolar?. ¡Nos ha fundido el niño con la Venus de Veleia!. Parece que este chaval conocía la anatomía femenina mejor que el que dibujó el cerdito asaeteado la del jabalí (o la del cerdo, que tiene tela el grafito).
Pero ¿Qué enseñaba esa calamidad de maestro?

-A y Koenraaad, como si yo fuera la única en el «negacionismo «me remito a lo que dijo la guardia civil en su momento: «no sabemos qué pruebas hay que hacer «.Y no lo sabían porque no las hay ,simple y llanamente ;y además,no son necesarias. O ¿es que hay  una conspiración internacional de arqueólogos  y epigrafistas para acabar con el señor Gil ?le dejo ,una vez más (si en realidad ya se lo debe de saber de memoria ) el artículo de Alicia.M:Canto: La arqueometría y la autenticidad de los óstraka de Iruña-veleia 
-En fin…en Veleia todo es posible pero segurísimo que todos los papis del llamado lado “verista” no llevarían a sus niños a ese hipotético paedagogium por miedo, quizás, a que sus hijos sufrieran algún que otro accidente al escribir los dictados del profe sobre vidrio o duros trozos de hueso o incluso sobre cerámica sigillata que de blanda no tiene nada.  Pero es lo que hay.  Lo del NEFERTITI es de un despiste terrible, es que no tenían ni idea de que tal palabra fuese inventió de finales del XIX. 
-Esto no hará mella en los que se han dado por llamar veristas porque pienso que en realidad están justificándolo todo con las excepciones. Cuanto más raro es el objeto, más paralelismos o peregrinas teorías sobre su posibilidad surgen y más se justifica. (…) Observo que en la cascada de paralelismos que nos ofrecen a cada paso hay un falta de rigor en la selección que mezcla alguno que pudiera ser, con otros o que no tienen nada que ver o son muy discutibles. No conduce a ninguna parte señalarlos por cuanto si alguna vez se les han mostrado han pasado de todo y los siguen incluyendo en su enorme cajón de sastre de excepciones, paralelismos, parecidos casuales, falta de ortografía y otros monstruitos.
-Se ha dicho muchas veces desde hace años ,por quienes estaban capacitados para hacerlo que NO hacen falta pruebas físico-químicas para decidir si las piezas son buenas o no .Todos los especialistas coinciden en que no lo son .Se ha dicho ya muchas veces aquí :se conoce muy bien el mundo romano ,su escritura,su gramática,su cerámica ;no estamos ante un universo desconocido en el que haya mucho lugar para la imaginación.Ustedes,por el motivo que sea no quieren aceptarlo pues qué se le vá a hacer.A eso me refería con que ,desde el punto de vista científico está claro.Y  juez no puede opinar en eso.A mi modo de ver ,lo único que puede hacer es decidir si hay suficientes pruebas para aclarar cómo se hicieron las inscripciones ,quienes  etc.
-Pues que sean bienvenidas las pruebas que aclararán las circunstancias en las que se hicieron las inscripciones  y a ver si se cierra esto de una vez.Y seguro que no salen las huellas dactilares de los escolares de la  Domus Valentina que se destrozaban las manos escribiendo en los óstraka 🙂

-Yo lo que veo es que los veristas están más activos divulgando sus argumentos y tratando de deslegitimar a los falsistas de renombre, pero eso no quiere decir que haya repliegue de los falsistas ni argumentos que hayan sido rebatidos ni falsistas de renombre que hayan visto la luz. Es más, no veo nada nuevo.
-Si hay analíticas que permitan datar los grafitos los resultados no irán en contra de la lógica y en esos grafitos hay muchas cosas no lógicas. De todos modos, la sensación que tengo es que, se hagan las pruebas que se hagan, los grafitos excepcionales van a acabar convirtiéndose en una especie de Sábana Santa de Turín para los veristas irreductibles , que creerán que el resto no entiende nada o, peor aún, que tratan de engañarlos o manipularlos con oscuros fines.

-¿Por qué para justificar la existencia de esos materiales extraordinarios hay que fabular con la existencia de un maestro sui generis venido de la otra punta del Imperio que logra de sus alumnos una producción de material escolar revolucionario que no tiene parangón en todo el Imperio Romano ni en el tiempo ni en el espacio?

-Las «opiniones» son las tuyas cuando de estas cosas hablas, las que pronuncia un experto son lisa y llanamente:  LECCIONES. 
-Todo muy en la línea lógica que siguen algunos en este foro. No sólo es que aparezcan palabras, símbolos y signos imposibles, no sólo es que los soportes sean alucinantes para una escuela de chavales (sigilatas, huesos, vidrio), no, es que además los pobres alumnos tenían que escarbar en los basureros de la ciudad de Veleia, muy polita, pero muy rara, para buscar huesos, para escribir, de una antigüedad de más de 200 años, por los extraños caprichos del preceptor. En fin, que cosas.

-Me imagino los almacenes de huesos ,creados  a través  de casi dos siglos   en el patio de la domus valentina a los que acudirían los alumnos cada vez que necesitaran material para escribir…con lo fácil que sería que cada uno tuviera su tablilla para cera..¿  tan mal estaba la economía de Veleia como para tener que  reciclar los huesos que sobraban de la comida para  soposrte de escritura? lo siento,me había propuesto   intervenir sólo para hacer comentarios   pertinentes pero es que hay cosas muy raras.Lo de que la mejor explicación es la más sencilla no cuadra aquí

-El oso ‘muy’ y lagun ‘amigo’ y otra manada de unicornios los discutimos otro día, que según veo esto va por temas (es decir, un tema / un día). Pero te adelanto, Van den Driessche / Mommsen, que esto puede acabar como la canción de los elefantes, en que en cada bis entra uno (Un unicooorniooo, se balanceaaabaaa, sooobre un ostracon de Beleeeia, y como veíííaaa, que algunos se lo creííían, fueron a llamar a otro unicooornio…).

-La del pedagogium es una hipótesis que no se sostiene. Por mucho que se hayan perdido los materiales perecederos de supuesta la escuela (tablillas, etc) eso no justifica la presencia de cerámicas, vidrios, huesos (sacados de la escombrera al parecer, tela marinera)  y ladrillos usados como material escolar, y menos como “material de borrador” tratando de justificar los abundantes  errores de escritura.
Y cierto que excepcionalidad no es prueba de imposibilidad. Pero es  que  son un montón de excepciones las que se dan a la vez en el mismo sitio, lo que hace muy remota la posibilidad. Es, por ejemplo, como que a alguien le tocase en la misma semana la lotería, el cupón de la ONCE, la bonoloto, una quiniela de  14, el bingo y  el premio de la máquina tragaperras del bar. 

-¿Qué aquí se está demostrando que las afirmaciones en relación con la falsedad de los grafitos no son correctas? Todo lo contrario. Se han objetado todos los argumentos a favor de la veracidad uno por uno, aduciendo su incorrección y que son falsos, empezando por el de (supuestamente) más peso, llegando a los casí ridículos y todo esto de forma repetida a lo largo de los años. Pero Vds. siguen y siguen, a ver si alguien no contesta y queda como que tienen razón. Y ya, cuando no les quedan argumentos recurren a la imaginación y la fantasía de objetos imposibles o únicos como los hapax y oopart. Lo siguiente serán los viajes en el tiempo y los extraterrestres.

-Es posible que si en otros pedagogiums del Imperio hubieran utilizado los materiales que aquí se describen, como complemento a las (por lo visto) caras tablillas de cera, también se habrían encontrado. La no presencia de materiales de este tipo y en estas cantidades indica que no  estaba extendido el uso escolar de materiales de basurero.

-¿Qué hay de lógico en usar como material escolar basuras en las que escribir es dificultoso y arriesgado por muy barato que fuese? ¿Qué necesidad tenía una familia patricia de permitir que la educación de sus hijos se hiciese en esas condiciones?


(…et multae aliae margaritae). Extractos tomados a partir de diciembre de 2012 de la conversación del post de Terrae Antiquae Iruña Veleia y sus «revolucionarios» grafitos VIII: Más cerca de la autoría, publicado por Alicia M. Canto el enero 31, 2010: